Se accidentó una familia de General Villegas en un vuelco
Walter Fenocchio, su esposa e hijos y un joven regresaban de un casamiento en la provincia de Mendoza.
En el auto, un Renault Megane que era conducido por Walter Fenocchio, de 52 años, viajaban cinco personas, junto a él, su esposa Silvia Tártara de 47 años, dos de sus hijos, Octavio de 11, Delfina de 16 y el novio de ésta, Mateo López de la misma edad.
A las 18:30 horas luego de haber pernoctado, cuando regresaban de un casamiento al que habían asistido la noche anterior en Alvear, provincia de Mendoza, en el kilómetro 655 de la Ruta 188 a 30 kilómetros de Unión, provincia de San Luis se produjo el incidente.
Delante del auto en el que viajaban los villeguenses también lo hacían dos vehículos, el más cercano una Renault Fuego a la que al intentar pasar se encuentra de frente con otro vehículo; se trataba de un Fiat Siena color gris, conducido por una persona de Buenos Aires, el que aparentemente circulaba con las luces reglamentarias apagadas, lo que se cree, contribuyó además del color y la hora del día, a que Fenocchio no lo advirtiera sino hasta cuando estaban a corta distancia; en esa situación, sin posibilidades de maniobrar, pasan al mismo tiempo los tres autos, y es allí cuando se produce el despiste del Megane que circula unos metros por la arenosa banquina contraria, terminando luego de clavarse, dando al menos tres tumbos quedando, como muestran las imágenes en posición invertida.
El conductor fue el primero en salir por sus propios medios del habitáculo, luego lo hizo el resto, todos golpeados pero ilesos.
A los pocos minutos fueron llegando diferentes personas que transitaban por el lugar quienes dieron aviso a Bomberos y Policía ya que en esa zona la señal de los teléfonos celulares es casi nula. Una vez constituidos éstos en el lugar del hecho, asistieron y trasladaron hasta el Hospital a todos los ocupantes, salvo el conductor. Una vez dados de alta, se trasladaron hacia nuestra ciudad donde se encuentran desde anoche.
Hoy, visiblemente angustiados y doloridos, celebran que los daños fueron solamente materiales. Walter en diálogo con Distrito Interior, trata de reconstruir los detalles previos al vuelco, dudando si pudo haber sido rosado por la ocupé Fuego al momento del exigido sobrepaso o hubo otros factores que provocaron el desenlace. Como fuera y él mismo reconoce; los «fierros» se arreglan y si no, con el tiempo y esfuerzo se llegará a otro vehículo.