Caso del video: La familia Lezcano ya no vive en General Villegas

Como lo habían anunciado, luego de lo sucedido con la aparición de las imágenes, la menor su madre y su padre buscaron un nuevo destino.

Así lo confirmó a Distrito Interior, Alberto Lezcano, que junto a su esposa, Blanca Rosa Muñoz y su hija, hoy de 17 años, quien cumple la mayoría de edad el próximo sábado 13, iniciaron una nueva vida en la localidad de El Volcán, provincia de San Luis, distante a 18 kilómetros de la capital puntana y 430 de General Villegas.

El disparador principal de la decisión fue lo por todos conocidos, que los llevó a planificar este nuevo rumbo, coincidiendo a fines de 2012 con la necesidad de la continuidad de los estudios de la hija de ambos, que actualmente cursa la licenciatura en Nutrición en la ciudad de San Luis.

Esta nueva etapa los encuentra muy tranquilos, destaca el jefe de la familia y relata telefónicamente que está dedicado a los mandados, actividad que desarrolló por años en nuestra ciudad, a la que le ha sumado servicio de remis y , emparchado de gomas de autos, motos y bicicletas. También trámites entre ambas provincias, aprovechando los viajes que realiza.

Los inmuebles de la familia están alquilados y con eso afronta el costo de ese gasto en la nueva tierra. Por esos motivos y porque sus hijos mayores quedaron aquí, continúan vinculados a General Villegas.

Consultado por el destino elegido  relata que al lugar lo conocían como turistas, al haber pasado algunas vacaciones por la zona, y que casi por azar, esta vez dieron con las personas indicadas para poder alquilar. Desde los primeros días del año están radicados allí.

De ellos, que fueron una parte de uno de los casos que sacudió al país, casi no se habla en la ciudad; aunque ha quedado claro que no se olvida; lo mismo del resto de los involucrados. El tema en general, tiene algunas particularidades, que lo hacen casi necesariamente intratable.

Si bien la ciudad va creciendo y de pueblo va perdiendo cosas, aún conserva otras; y son esas, las que ponen la mirada tanto en los que recién llegan y también en los que se van. Este último detalle, llevó a algunos a comentar sobre el particular, haciéndonos sentir, en nuestro carácter de espacio de comunicación e información, que debíamos consultar para saber si tenía crédito el rumor o se desestimaba como tal. La respuesta a la inquietud, está en todo lo detallado anteriormente, descripto de acuerdo a lo informado por la fuente.