Celebraron la colocación del medidor comunitario con una choripaneada en la calle
Los vecinos del barrio ubicado detrás del Vivero, festejaron con guitarra y choripanes la respuesta obtenida después del reclamo.
Consiguieron que el gerente de Eden los atendiera a través de tres representantes luego de que en la misma esquina de Ituzaingó y Batalla del Buceo, en la que se juntaron a festejar, quemaran gomas para que los oyeran.
Este fue un primer paso, refieren sobre la instalación de un medidor comunitario que les proporciona mejor tensión que la precaria conexión que les suministraba energía; ahora esperan por el inicio de la obra, previsto para el próximo lunes. Ahí, haremos una gran fiesta, aseguran.
Estuvieron presentes en el lugar las familias y los vecinos que tuvieron mayor protagonismo en la protesta, como una manera de mantener el vínculo que se generó entre ellos, el que derivará en una comisión que seguirá reclamando por las cosas que consideran necesarias, pero que a la vez también aportaran los suyo, ya que no esperan que todo se lo den.
Además del anuncio del compromiso de la construcción del tendido eléctrico en el barrio, se realizó el desmalezamiento de algunos terrenos.
Los más urgente luego de finalizada la obra, señalan, es la colocación de containers para depositar allí la basura y el saneamiento o la cobertura de un zanjón a cielo abierto, por el que el Municipio le realizó una denuncia a ABSA al detectar aguas servidas provenientes de la planta de tratamientos de líquidos cloacales urbanos, en su caudal; a eso además de insalubre lo consideran una amenaza para los más chicos que juegan por las inmediaciones.
Los vecinos, que no son todo quienes habitan el lugar, los que participaron del reclamo, se muestran decididos y entusiasmados con lo que parece una nueva etapa para el lugar donde habitan, habiéndose demostrado a si mismos, entre otras cosas, que la unión hace la fuerza.