La comunidad educativa conmovida por el crimen de Lucrecia Lietzman
La muerte de la joven docente en el interior del jardín de Infantes de Villa Saboya, exige toda la atención para el comienzo de clases.
Así lo entienden las autoridades educativas que estuvieron en el lugar desde la primera hora, al igual que las de seguridad del distrito, ni bien se conoció el hecho.
El inicio de clases en el servicio será normalmente, dependiendo siempre de la situación gremial; ya que se establece la suspensión de clases en caso que el fallecimiento suceda durante un día hábil.
La docente, por estos días, ocupaba el cargo de directora en reemplazo de Fabiana Cumella, de licencia por maternidad y en el momento del ataque, se encontraba fuera de su horario, ya que en verano es de 8 a 12 horas. Un detalle no menor, que es frecuente que las docentes y más aún, en escuelas o servicios rurales; se encontraba decorando y arreglando el lugar para el inicio del ciclo lectivo. Momentos antes de lo ocurrido, según información brindada a Distrito Interior por allegados, Lucrecia había ido a retirar algunos muebles como mesas, sillas y otros a las escuela Nº8, distante a unos 50 metros del jardín.
Si bien el homicidio ocurrió en el lugar de trabajo, se trato de un hecho ajeno a la función, por lo tanto no interviene la Dirección General de escuelas y Educación; ¡ de todas maneras, habrá por parte de las autoridades educativas un acompañamiento en todo momento. La Inspectora jefe, y las inspectoras de Psicología e Inicial, estarán esta mañana en la localidad acompañando en lo que sea necesario, más allá del feriado. Del mismo modo prevén para el primer tramo del ciclo lectivo tareas de sostén en la comunidad, sobre todo en los alumnos que tenían por esta docente un afecto especial.
Los cuerpos fueron anoche trasladados al Hospital de General Villegas para cumplir con las tareas de rigor y luego de la restitución a sus respectivas familias, serían velados, Sánchez en Villa Saboya y Lietzmann en Rufino.
El hecho
Según los primeros datos, la Policía tomó conocimiento alrededor de las 16:30 horas, de la presencia de un cuerpo colgado, sin vida, en el cementerio local; allí se determinó que se trataba de Fernando Adrián Sánchez, de 26 años, a quien se le observaban manchas de sangre en la ropa, lo que llamó la atención de los efectivos. A los pocos minutos, un vecino, advirtió a éstos del hallazgo sin vida de la maestra jardinera de la localidad, que estaba en el interior del establecimiento, el jardín de Infantes Nº 911 “Alfonsina Storni”, con aparentes signos de haber sido degollada, ya que presentaba cortes en el cuello.
Las causas de las muertes son motivo de investigación pero se cree puede haber conexión entre ambos, ya que se presume, por trascendidos, que podría tratarse del desenlace fatal por una cuestión sentimental.
La mujer, madre de tres hijos, es oriunda de Rufino y está radicada hace unos años en la localidad, luego de contraer matrimonio con una persona de ese medio.
No es un «desenlace fatal». Es un femicida cobarde que decidió matarse porque no tenía los huevos para ir preso.