Elecciones 2017: Esta vez el pueblo no seremos la parte de abajo, sino el sostén de los de arriba
La rueda de la política vuelve a pasar por el lugar que debe cada dos años, cumpliendo así con su rutina de renovarse sin grandes cambios.
Pero esta vez «parece» todo diferente en el distrito de General Villegas.
No serán los políticos los que tengan que convencernos, sino nosotros, el electorado, quienes los comprometamos.
Porque quien gane, no habrá tenido el mejor discurso, sino que asumirá el mayor compromiso.
Es que este distrito, inmenso en extensión, profundo en su crisis y especial por su gente, necesita hechos (ya no más palabras).
Sus tierras deben producir, sus caminos ser transitados, sus negocios comercializar y sobre todo su gente trabajar.
Además de «sanarlo» quizá haya que «reinventarlo».
La naturaleza siempre sabia, con su furia «inundadora», invita a que le pongamos tope a la indiferencia (inoperancia, comodidad, perpetuidad de modos y formas, etc) que tuvimos (los vecinos) y la que tuvieron (los políticos) ante lo que inevitablemente nos sucedería … y sucedió.
Por eso la responsabilidad hoy es compartida.
Juntos llegamos hasta acá y juntos saldremos de acá.
Nosotros cumpliendo y luego exigiendo y ellos proponiendo y luego haciendo (nunca más diciendo).
Es que el próximo Agosto y Octubre, meses en los que votaremos, debemos asistir, sufragar y hacerlo convencidos que al poner el sobre en la urna, en realidad no le estaremos dando un lugar en el Concejo Deliberante a un candidato sino obligándolo a cumplir.
Esta vez el pueblo no seremos la parte de abajo, sino el sostén de los de arriba.
No dejar de concurrir a votar, no hacerlo en blanco, no dejar de cuestionar y hasta sugerir y criticar (si lo cree necesario para mejorar); ese será el primer paso hacia el gran distrito que sabremos conseguir.