En General Villegas a todos nos gustaría “que hagan lo que hay que hacer”. SAQUEN EL AGUA

Con esa frase culmina una nota enviada por un vecino del distrito que en el día de ayer realizó un vuelo por la zona afectada (todo el partido de General Villegas), el que le permitió establecer con real dimensión la gravedad de la situación en la que estamos viviendo (tal vez podríamos decir, que nos hacen vivir ya que se está aún a la espera de la decisión de la Gobernadora para que el agua salga con mayor caudal de nuestras tierras); motivo por el cual, como publicamos a continuación, José Luis Mellana describió y reflexionó sobre lo experimentado.

Estimado lector, saque usted sus propias conclusiones.

SOMOS EL PATIO DE ATRÁS…

Dada la evidente falta de conocimiento en general que se tiene de la grave situación hídrica que nos afecta, decidí involucrarme, y en el día de ayer, 29/04/2017, realicé un vuelo sobre una parte del partido de General Villegas. Me acompañó un muy buen amigo y primo, el Ingeniero Agrónomo Mauricio Di Plácido. Fue nuestro piloto el Ingeniero Agrónomo Ezequiel Paul.

Quedamos sorprendidos de lo que vimos. Estamos viviendo la peor inundación en toda la historia de nuestro partido.

Partimos de la localidad de Tres Algarrobos, en dirección hacia General Villegas. Sobrevolamos la ruta 226, Los Laureles, La Laguna de Yalet. Pasamos por la ciudad cabecera, donde tomamos fotos y filmamos la Escuela Agraria, el Aeroclub, su zona de influencia y seguimos el camino del agua en dirección a Emilio V. Bunge. Allí tomamos fotos del agua que rodea a la fábrica de Remotti, uno de los lugares más altos de Emilio V. Bunge, y que nunca tuvo agua en su historia. Pasamos por La Juanita. Seguimos hacia Charlone, de allí a la ruta 4, Laguna del 7 en Serrano y seguimos hacia Melo. De allí a Santa Regina y su zona rural. Continuamos hacia Piedritas. Pasamos por la fábrica de quesos Alicahue, lugar que tampoco tuvo agua en toda su historia. Ahora sí. Y continuamos por la zona rural de Piedritas, cruzamos la ruta 188 al este de Villegas, siguiendo el agua desde la ruta 226 hacia el paso por Los Laureles, donde terminamos nuestro recorrido.

Todo lo anteriormente descrito me lleva a las siguientes conclusiones:
Nos han transformado intencionalmente en el reservorio de la Provincia de Buenos Aires. Del total del recorrido puedo afirmar que lo inundado y/o encharcado es más del 90%. Y lo que no está encharcado seguro que no se puede pisar porque el agua está a flor de tierra. No se ven tractores ni máquinas trabajando porque sencillamente no hay piso.

Todos los habitantes de la ciudad cabecera y los pueblos del partido deben manifestar si están dispuestos a ser la alternativa más “barata” que encontró la política para solucionar el problema del agua, a saber, que el Partido de General Villegas sea el único que pague los platos rotos de esta combinación de mal tiempo, producido por el evidente cambio climático, falta de obras y desidia de la política. De ser así, mantengámonos con la pasividad demostrada hasta el día de la fecha porque les está saliendo bárbaro.

Ahora, si lo que queremos es continuar teniendo una perspectiva de vida dentro del partido de General Villegas, debemos participar y exigir que se agranden las pasadas de agua en absolutamente todos los pasos.

Y que se corten las rutas donde se tienen que cortar. Con cortes generosos para que pase el agua y dejarla escurrir. Si el agua no corre, dejaremos de ser reservorio para transformarnos en una Picasa más grande.

En mi recorrido aéreo pude ver muy claramente que la ruta 4, por la que pasa una buena parte del agua que recibimos, tiene generosas alcantarillas en todos los lugares donde se acumula, lo que le permite a la localidad de Serrano tener muy poca agua en comparación con nuestros pueblos. Y pese al alcantarillado, la masa hídrica pasa por encima de la ruta. Y esa agua viene al partido de General Villegas. O sea que tenemos muchos meses por delante, para estar inundados. Y recemos, roguemos o pidámosle a la Divina Providencia que no llueva porque vamos a vivir una catástrofe y estoy tratando de ser prudente.

¿Por qué la política no nos dice cuánto tiempo más vamos a seguir con agua? ¿Por qué nos dicen que todo está bien y se inundan las lomas, se cierran tambos, peligran las fábricas y destruimos toda la economía regional? ¿Por qué se tarda tanto en tomar una decisión? ¿Por qué prorrogan los impuestos en vez de condonarlos a quien perdió todo su capital? ¿Por qué los aumentan? ¿Por qué para los pueblos las soluciones no llegan o lo hacen tarde?

¿Y saben por qué pasa esto? En mi opinión, porque todos lo toleramos, no participamos, y porque para la política, somos el patio de atrás de la Provincia de Buenos Aires. Y yo no quiero ser cómplice. Por eso protesto.

En General Villegas a todos nos gustaría “que hagan lo que hay que hacer”.
SAQUEN EL AGUA.