Ruta 50, vergüenza provincial
El tramo comprendido entre las ciudades de Lincoln y Vedia, que a su vez une las rutas nacionales 188 y 7, luce de la peor manera; y lo que es peor, desde hace muchos años. Aquí falta «valor agregado», «infraestructura» y a simple vista se advierte que la traza está «por debajo de la línea de pobreza».
Esos tres conceptos, son utilizados asiduamente cada vez que algún aspirante a un cargo electivo u ocupante de una banca (de cualquier fuerza) visita la zona; tal el caso del ahora pre candidato a gobernador, Julián Dominguez, sobre todo en tiempos en que era Ministro de Agricultura y el mismísimo armador de su espacio en la cuarta sección electoral, el cinco veces senador provincial Patricio García, que insiste en declarar la importancia de alinear el Municipio con la Provincia y la Nación para que las necesidades de los pobladores sean resueltas con celeridad .
Justamente, ambos intendentes, Jorge Fernandez, de Lincoln y Alberto Conocchiari de Leandro N. Alem, son kirchneristas de la primera hora. Sobran las palabras …
Basta con una simple recorrida por cualquier tramo que comprende los aproximadamente 45 kilómetros que separan a una ciudad de la otra, para mirar y ver, sufrir y padecer.
A los baches de diferentes diámetro y profundidad, se le suma la falta de señalización. No existen las líneas demarcadas ni los carteles.
Es común ver los autos, camiones, pick up, circulando en zig zag o estacionados a un costado cambiando neumáticos. Hay huellas marcadas sobre la banquina, la gente prefiere circular por allí.
Las consecuencias van desde la rotura de cubiertas, llantas y otras partes de un vehículo, hasta graves accidentes; desde el encarecimiento de la tarifa para cualquier viajero, ya que los precios de remises aumentan considerablemente por el riesgo, hasta la imposibilidad de realizar un viaje por lo anteriormente expuesto, entre otras. Las alternativas por ruta son, Lincoln – General Pinto – Germania – Alberdi – Vedia o Lincoln – Junín – Vedia, en todos los casos el kilometraje aumenta considerablemente.
Es una obra prometida, una ruta ignorada y sus usuarios, bonaerenses olvidados, asegura, con las pruebas a la vista, un «padecedor» de esta situación.
Así están casi todas las rutas de nuestro país (salvo San Luis) estos gobiernos no solo que no hicieron nuevas rutas asfaltadas o autovias si no que no fueron capaces de mantener rutas como esta que tiene mas de 30 años.
¡Como todas las RUTAS de nuestra Provincia! Y encima SCIOLI quiere ser Presidente!!!
Se quejan se quejan , pero siguen votando el mismo gobierno……..
En esa ruta yo rompí una yanta
Si vieran lo que está la ruta 226, la casí mas importante de la provincia de Buenos Aires que conecta a toda la gente de las provincias como San Luis, Mendoza a las costas.