La familia Urtiaga dejó ayer la cancha de padel luego del último robo
El episodio informado por Distrito Interior fue determinante para que se materialice la decisión de Nelson (foto) y Franco Urtiaga, padre e hijo que explotaban la cantina y cancha de padel del Centro Empleados de Comercio.
Visiblemente afectado, Nelson explicó que la reiteración de la situación los había desbordado y no daba para más. Mi hijo pasa muchas horas en el lugar, suele quedarse hasta la una de la madrugada, nosotros, junto a mi esposa hacemos lo mismo los fines de semana; tanto esfuerzo para que en diez minutos te hagan este desastre, enfatizó.
Ayer la Policía habría dado con el o los responsables del delito, pero ni eso lo satisfizo, ya que confirmó el motivo de su negativa a denunciar y saber. Del robo anterior se recuperó una bomba de agua la que aún no llegó a sus manos ya que permanece secuestrada en la comisaría, a esto se le suma que en el hecho anterior a los pocos días tuve que soportar al delincuente pasando frente a mi lugar de trabajo como si nada, eso te dice todo, concluyó.
