El presidente de Eclipse habló del nuevo técnico y el posible destino del «viejo» predio del club
Angel Fenocchio confirmó que Luis Alvarez (Luisa), es el nuevo DT del equipo de primera división de «La Maquinita», lugar que ocupara en otras oportunidades. Esta vez lo acompañará en la preparación física Ezequiel Crespo, quien está a cargo de la escuela de fútbol y el año anterior terminó el torneo formando parte del cuerpo técnico del equipo mayor. Con este paso dado, el próximo lunes 19 comienza la pretemporada.
Acerca de los objetivos, Fenocchio dijo que pretenden hacer un papel digno este año, nada estruendoso, en realidad honrar la historia del club. Lo más importante es reafirmar el trabajo con los niños, a futuro soñamos con jugadores hinchas. En ese sentido reconoció que a la hora de elegir al nuevo técnico se tuvo en cuenta la pertenencia de Alvarez. Hoy, sostuvo, Eclipse cuenta en su plantel con una gran mayoría de jugadores propios y de diferentes edades, creemos que él desde ese lugar puede amalgamar esas potencialidades y plasmarlas en el campo de juego.
También contó que este año quedó conformada una sub comisión de fútbol que estará abocada al plantel y cuerpo técnico y tendrá además la tarea de ser el interlocutor entre éstos y la Comisión Directiva.
El predio de la calle Vieytes
Si bien se reconoce al fútbol como el deporte saliente y sobre todo al equipo de primera división como la vidriera, la dirigencia no pierde de vista el resto de las actividades; tal es así que se piensa invertir fuertemente en infraestructura en el nuevo predio para el cual tenemos adquirida una importante cantidad de materiales, comentó el presidente.
Consultado sobre el futuro del «viejo» predio, dijo que no hay decisión al respecto, sobre todo porque es difícil que una Comisión asuma el costo de vender esa propiedad; aunque en la evolución del club ese debiera ser un paso a dar. Hace dos años pensaba de otra forma, hoy creo que será natural que eso suceda. No hay que enamorarse de algunas cosas, sobre todo por el importante valor inmobiliario que eso puede llegar a tener y el beneficio que representaría para la institución, en definitiva para la comunidad, porque somos un todo, finalizó.