Suspensión del Carnaval en General Pinto: «No solamente el pueblo está triste, sino esta comisión también está triste» (VIDEO)
Juan Manuel Blanco, presidente y Lucrecia Valenza, secretaria de la Comisión de Fiestas de General Pinto que durante años a tenido un papel fundamental en la organización del Carnaval de la ciudad cabecera se refirieron a la decisión este año de no realizar el corso.
En el mes de diciembre en una nota realizada con Distrito Interior el intendente Zavatarelli había adelantado que el Carnaval difícilmente fuera a realizarse este 2024 debido a la situación económica del país, principalmente por la decisión del gobierno nacional de no acompañar este tipo de eventos como había sido hasta el momento, a lo que se sumaba la necesidad de establecer prioridades de cara al nuevo año, dándoselas al personal municipal y el cobro de sus haberes y a la prestación de los servicios esenciales.
Así fue como finalmente prosperó la no realización del Carnaval por parte de la Municipalidad, decisión que debió aceptar la Comisión que forman Blanco y Valenza, explicando mediante la publicación de un comunicado sus razones.
A la par de esta noticia surgieron diferentes planteos, ideas e inquietudes de vecinos, incluso algunos de ellos agrupados intentando organizar alguna movida alternativa.
Entrevistados por Distrito Interior, Juan manuel Blanco y Lucrecia Valenza explicaron los pormenores de la decisión que adoptaron ,muy a su pesar, aseguraron, comentando, entre otras cosas, que los fondos con los que cuentan resultan insuficientes aún si quisieran hacer un carnaval económico.
Los entrevistaron recordaron el papel que la comisión cumple en el Carnaval mediante el cual se acompaña, como se ha hecho cada año, a quienes presentan diferentes motivos, con fondos económicos para poder plasmar sus proyectos en el circuito, a su vez, la cantina que es su ingreso casi exclusivo, contempla la existencia de precios populares para que todos puedan acceder holgadamente a lo que se ofrece para comer y beber.
En ese sentido comentaron que hasta el año anterior los proveedores les vendían a consignación o permitiéndoles el pago posterior a la realización del carnaval, posibilidades que este no cuentan.
Llevar el carnaval a la mínima expresión o pensar en hacerlo cobrando una entrada, no solamente pondría en riesgo su esplendor, sino que la baja en la concurrencia que ello significaría, haría imposible recaudar los fondos necesarios para afrontar entre otras cosas el costo de los baños, la seguridad, etc.
Ante este panorama la decisión debió ser la de la suspensión esperando que el año próximo se puedan realizar con la habitualidad de los años anteriores.
Valenza recordó que apenas saliendo d ela pandemia General Pinto fue uno de los pocos municipios, o el único, en la región en realizar el Carnaval, entendiendo que la gente necesitaba tener esta fiesta; en ese momento en que los fondos estaban, se le dio prioridad por la importancia que entienden tiene para los pintenses.
Con este comentario, intentó explicar lo extrema que resulta la situación como para haber llegado a esta instancia.
Sobre el grupo de personas que se vienen reuniendo con el fin de lograr el carnaval a pesar de todos, tanto Blanco como Valenza, dijeron que están para asesorar y acompañar en todo lo que puedan si lo concretaran, aunque insistieron en lo complicado de esa posibilidad y el escaso tiempo con el que cuentan.
Finalmente y en el cierre de la nota, la frase fue, tal como expresa el título: «No solamente el pueblo está triste, sino esta comisión también está triste».
Cuando leí el título pensé en algún personaje reconocido y muy querido en Pinto había fallecido resulta que se suspenden por cuestión económica ,hay cosas más importantes como cincuenta porciento de los habitantes de nuestro país pobre que no comen todos los días Que bueno sería tener EMPATIA
Excelente reflexión; si estuviésemos gobernados por el populismo seguramente habría aparecido el dinero para los carnavales, entonces estaríamos «contentos» por la fiesta pero ni nos acordaríamos del 50 % de los Argentinos que no comen todos los días; acá hay que tener en cuenta dos cosas, una es que no se puede tapar la realidad con un corso y la otra es que los despilfarros de dinero siempre traen consecuencias.