HISTORIAS QUE INSPIRAN: el chico que elaboraba y vendía churros logró recibirse de profesor de Educación Física (VIDEO)
Carlitos Pescara, de General Villegas, ya es oficialmente profesor de Educación Física, uno de los objetivos que se había fijado cuando cursaba el último año del secundario, etapa en la que descubrió que el esfuerzo, la dedicación y la responsabilidad dan sus frutos y materializan los sueños.
Hace poco más de un año, en el programa Las Cosas por el Aire que conduce Fernando Cisarello los sábado en FM Peregrina (92.9), Carlitos, como lo llaman todos, había accedido a contar su reciente historia que lo ubicaba y sigue manteniendo ese lugar, entre los ejemplos para adolescentes, aunque también vale su experiencia para cualquier edad.
Acercándose al final del ciclo siendo alumno del secundario quería en su fiesta de graduación vestir un traje blanco, por lo que al comentárselo a su madre, uno de sus pilares fundamentales en la vida, ésta lo instó a comercializar churros, de modo tal de conseguir el dinero necesario. Lo logró, y luego fue por más.
Resumiendo, junto a su novia, otra de las robustas columnas de su vida, inició el difícil camino del emprendimiento creando «Churros CyC» con el que construyó la casa que ambos comparten y pudo estudiar recibiéndose de profesor de Eduación Física; en el medio estuvieron la pandemia y la crisis económica del país, por citar algunos de los obstáculos a los que se enfrentó hasta alcanzar estos objetivos. «Estos objetivos», porque lo conseguido no marca un ciclo cerrado sino todo lo contrario para este joven de apenas 21 años, que va por más.
La entrevista que rondó los 40 minutos es una inspiración, una luz de esperanza para permitirnos tratar de desterrar expresiones instaladas que solo nos hacen creer que no podríamos.
Es una cuestión de actitud, más allá que a veces el contexto en el que hemos nacido nos parezca totalmente adverso; y aunque suene a frase hecha, (casi) siempre se puede.
Hoy se desempeña como cajero en uno de los supermercados de la ciudad cabecera y da clases de natación entre el turno de la mañana y el de la tarde, mientras sueña poder ejercer en el ámbito escolar donde «su doctrina» puede contagiar a los alumnos; mientras tanto vive (en el más amplio sentido de la palabra).
No es un héroe, pero si «un distinto» haciendo lo que debería ser lógico en nuestra sociedad. Su testimonio/guía es una de las tantas historias que inspiran; de allí que con gusto los invitamos a conocer y replicarla.
Excelente nota! Un genio Carlitos!
TIENEN IDEA DE LA CANTIDAD DE CHICOS QUE LABURAN Y VIVEN COMO PUEDEN PARA ALCANZAR UN TIOTULO UNIVERSITARIO??? SON MUCHOS Y CON MUCHOS SACRIFICIOS