General Villegas: alumnos de las escuelas Técnica y Especial participaron de una nueva edición de La Chocleada
El miércoles se llevó a cabo por cuarta vez en nuestra ciudad La Chocleada, una jornada a campo donde unos 130 alumnos de la Escuela Técnica y la Escuela Especial participaron cosechando a mano una hectárea de maíz que luego se convierte en alimento para quienes más lo necesitan.
Este es el objetivo de esta tarea que lleva adelante desde hace años la ONG Movilizarte a la que en esta oportunidad adhirieron Lartirigoyen, Cargill, Cofco y La Negra, esta última propietaria de la estancia La Cantábrica, donde se realizó la jornada que inició pasadas las 10:00 hs con la llegada de los alumnos al campo y se extendió hasta media tarde.
Allí los esperaba una experiencia que los pondría de cara a un ejercicio fundamental para la vida en comunidad como son los valores.
«La Chocleada es un programa social y solidario creado en el 2005 por productores agropecuarios. Consiste en la recolección manual de una hectárea de maíz, donada por un productor rural. Cuando el producto se encuentra apto para su consumo como choclo o maíz seco. Los encargados de esta tarea son los integrantes de la comunidad más cercana a la hectárea, principalmente alumnos de colegios secundarios acompañados por docentes, padres, instituciones locales y quienes deseen participar.
De este modo involucramos a las comunidades, específicamente a los jóvenes, en una acción solidaria. En el caso de los choclos cosechados, estos son enviados directamente a los distintos comedores asistenciales de todo el país, y en el caso de las chocleadas de maíz seco, lo cosechado se comercializa y con ese dinero se compran alimentos no perecederos que también son entregados a comedores de todo el país. Asimismo, los alumnos de las escuelas eligen una organización social de su propia comunidad a la cual ayudar con la venta simbólica de lo cosechado», detalla en su portal Movilizarse.
Desde las primeras horas del miércoles 9 de agosto, personal de las empresas participantes montaron y desplegaron lo necesario para la actividad. Los alumnos, docentes y en algunos casos directivos, arribaron en el micro, viajando todos juntos desde la ciudad para tomar contacto con un día que probablemente resultará de suma importancia para muchos de ellos.
«Estamos conformes, pero sobre todo satisfechos; esto que tiene por objetivo trabajar los valores combatiendo el hambre, es una enseñanza para todos que no solamente nos incluye, sino que nos alcanza, por eso le ponemos tanto empeño y dedicación, cada año es un nuevo desafío, pero principalmente una nueva oportunidad de ser mejores como sociedad», sostuvo Andrés Martani de Lartirigoyen sobre el final del día.
Parece que cosechan maíz, no choclos, hasta la planta está seca