El calvario de Jesús, hecho en General Villegas, una obra que expresa lo que a cada uno le provoca
Ivana Boccio es una fotógrafa joven que se encuentra radicada y asentada desde hace años en General Villegas, que ha sabido a lo largo de los años mostrar dos aspectos de su trabajo, el social al que se dedicó hasta que su salud se lo permitió y el artístico que acaba de volver a plasmar en una obra que puede resultar tan provocadora como movilizante.
El calvario de Jesús fue hecho íntegramente en General Villegas, desde el modelo, la maquilladora y hasta la confección de los clavos de la cruz son de esta tierra, es decir todo estaba acá, solo faltaba descubrirlo y plasmarlo. Ivana lo hizo.
La obra fue mostrándola de a poco la artista en sus redes y en la misma proporción fue viéndose la reacción que provocaba en la gente, aún completa no ha sido exhibida al público, pero merecería un espacio, especialmente cuando transitamos la Semana Santa.
El modelo utilizado para esta producción y quienes lo intervinieron merecen un capítulo aparte. Por la característica de ciudad pueblo en la que habitamos una de las cosas que más llamó la atención fue quien representó a Jesús; Ivana Boccio vio en Marco Pedrini, El Gringo como se lo conoce a este bombero voluntario, trabajador de obras, «vecino de a pie», el rostro de Jesús; contó a Distrito Interior que estando en la búsqueda, pensando en lo que hoy concretó, un día de calor, mientras trabajaba en su casa vio en este villeguense representada la figura que tanto buscaba, le hizo la propuesta y a pesar de no haber tenido nunca una experiencia de este tipo accedió.
Así inició este camino al que se sumó Natalia Cruz con el maquillaje, Letras Corpóreas, una empresa local a la que se le encargó la confección de los clavos y su hija que desde siempre la acompaña y comparte la pasión por el arte, desde la danza.
La intervención post producción fue mínima comparada con lo que podría haber sido, sin embargo la atención estuvo puesta en la expresión y entorno, sin descuidar los ángulos, luz y otros detalles; en definitiva, tan espontánea y simple como fue (o es Jesús).
Ivana Boccio inició un nuevo camino en su vida laboral obligada por la salud, en la medida de lo posible por su vena artística correrán otras obras que a medida que la inspiración, la inquietud y el tiempo lo permitan iremos viendo, mientras tanto, no siento la únicas las publicadas en este artículo, estas son imágenes para disfrutar, analizar y con las que debatir.
Una invitación a mirar (y ver) al Jesús que nos mira.
Muy bueno!! Felicitaciones.