ESPACIO DE OPINIÓN: sobre guerrillas y «la otra mitad» de la Memoria. Se tenía que decir … (*)
Imaginate que te desaparecen a tu tío que participa en un sindicato, que secuestran a tu prima que da la chocolatada en el barrio, que torturan a tu amigo por hablar de política en clases o que matan a tu papá por repartir folletos en la calle. Encima, están proscriptos varios partidos políticos en Argentina, con algunos líderes exiliados, y se instalan medidas económicas que solo favorecen a los que más tienen. Y lo peor de todo: es el Estado el que ejecuta esas acciones, no sólo en Argentina sino en varios países latinos (googlear Plan Cóndor).
Ahora te pregunto. Vos, situándote en esa época donde no había ni mensajes de texto, ¿qué hubieses hecho para defenderte de tanto hostigamiento y sin que te maten a vos o a tu familia? No hace falta que respondas, pero sí hubo gente que encontró respuestas, algunos grupos de manera muy violenta ante la desesperanza y otros de manera más pacífica con mucha resignación. ¿Cómo juzgar las diferentes reacciones? Si de los que opinamos hoy, pocos eran los que estaban opinando en esa época libremente como lo hacemos ahora…
Esta es «la otra mitad» de la historia que tanto preguntan algunos sectores malintencionados, que en esos años fueron cómplices de todas las atrocidades y ahora buscan algún halo moral en el cual refugiarse para justificar el proceso cívico-militar.
Tengamos cuidado, y respeto, con algunas frases de manual que repetimos por ahí.
(*) Escribe Matías Bazán Merlo, integrante de la Comisión por la Memoria, la Verdad y la Justicia de General Villegas.
Da asco el zurdaje. Cuenten tambien como metian bombas y asesinaban niños los «jovenes idealistas»…..
Leí la nota de opinión, esperando justamente «la otra mitad». Creo q la historia se cuenta mirando las 2 caras. Estoy en desacuerdo con los desaparecidos por tener una opinión distinta pero tampoco veo bien q, en la creencia de defender nuestros derechos se maten inocentes. Mostremos las cosas con objetividad. Lo q está mal para unos, está mal para todos. No podemos avalar actos q son punibles para cualquier ciudadano. Hay q respetar la vida de cualquier persona independientemente de su idiosincrasia. La historia se cuenta con la verdad. Cada uno, puede creer lo q le quede más cómodo pero después de haber analizado y entendido q pretendía y perseguía cada parte. Sólo así podemos ser objetivos con los hechos y los personajes de la historia.