Luego de 30 años, la recolección de residuos en General Pinto dejará de ser prestada por la empresa local «El Hornero»
El pasado 10 de agosto se llevó a cabo la apertura de sobres de la Licitación Pública en el palacio Municipal donde se conoció el ganador.
Como ocurre cada seis años, se realiza el llamado a Licitación que en esta oportunidad tuvo más de un oferente y en la compulsa, el ganador no fue El Hornero, la empresa local de la familia Barizoni (Hector e hijos) que desde 1992 cumplía con la tarea.
El servicio desde el próximo primero de septiembre estará a cargo de Agrotécnica Fueguina de Río Grande, provincia de Tierra del Fuego, que presta, además, el mismo servicio en el municipio de Lincoln.
Tres ítems fueron fundamentales en las condiciones: equipamiento, experiencia y oferta económica.
En equipos y oferta económica ($ 1.500.000 menos anualmente pasó la firma foránea) la beneficiada resultó Agrotécnica Fueguina, en experiencia, El Hornero.
Luego de cumplidos todos los requisitos legales establecidos y dado el resultado la recolección de residuos pasa a nuevas manos desde 1992.
Para destacar, comentó a Distrito Interior la fuente consultada que le fue impuesto a la nueva empresa como condición que absorbiera a los empleados de la empresa pintense para garantizar las fuentes de trabajo; así fue que los empleados pasan a desempeñarse bajo el nuevo empleador bajo convenio de Camioneros, de acuerdo a lo especificado por uno de los trabajadores (lo que probablemente mejore lo percibido mensualmente).
Concluyen su relación laboral con El Hornero, luego de tres décadas, previo acuerdo y desde cero inician bajo dependencia laboral con Agrotécnica Fueguina.
Este trámite administrativo que significó la desvinculación de una empresa local con el municipio, no es más que un paso legal que se debe cumplir y se cumple en lo estatal; pero dado el sentimiento de pertenencia y los años que la familia Barizoni llevaba, de manera muy efectiva prestando el servicio, no es un hecho menor para la comunidad que vive en su mayoría a este traspaso con notable nostalgia.
Lamentablemente en ese pueblo no se puede apostar a nada. Una empresa local dejada de lado por acomodos de terceros