Gral. Villegas: delincuentes lograron sustraer una importante cantidad de dinero simulando un secuestro
Esta madrugada la familia Ostoich – Pelossi, domiciliados en la calle Saavedra recibieron un llamado en el que se oía la voz de una mujer, simulando maltrato y desesperación que el indicaba era una de sus hijas que se encuentra domiciliada en otra provincia.
El llamado fue atendido por el padre de la supuesta joven de la que le aseguraban tenían secuestrada y para su liberación le exigían una importante suma de dinero en moneda extranjera y joyas.
Mientras Ostoich mantenía la comunicación, su esposa, advirtiendo que era una típica llamada del cuento del tío, intentaba convencerlo de colgar, sin embargo este, ante la duda continuó hablando y negociando con los malvivientes.
Durante el hecho las víctimas trataron sin éxito de comunicarse con la hija, y es aquí donde surge un detalle muy llamativo; todos los teléfonos estaban bloqueados por llamados; es decir que claramente hubo previamente un trabajo de inteligencia que permitió no dejar nada librado al azar para poder cumplir con el ardid.
Inicialmente le solicitaban 300.000 dólares, que al ver que no contaban con esa suma acordaron lo que había en el domicilio; eran dólares que pertenecían a la familia Pelosi, eran ahorros para la mamá de ellos, fallecida en el mes de diciembre último, con los que pagaban los gastos que demandaba su cuidado, explicó José Luis, hermano de la mujer afectada por este eposodio.
Le hicieron contar el dinero haciendo ruido con la bolsa para escuchar que efectivamente existían los billetes, luego le dijeron que dejara sobre su camioneta, estacionada en la puerta de la casa, toda la plata y que al entrar a la casa tirara la cadena del baño para asegurarse que no volvería a salir; mientras tanto en todo momento amenazaban a la mujer, de quien oían su voz insistiendo en que era una trampa que si no deponía su actitud o se asomaba al exterior a su hija la matarían.
Así fue como en cuestión de minutos, y una vez que los desconocidos recogieron los dólares, unos 3.500 aproximadamente, que se llevaron aparentemente a bordo de una moto, pudieron contactarse con su hija, quien estaba en perfectas condiciones.
Seguidamente dieron a viso a la Policía y comenzaron las diligencias de rigor; a su vez, hasta el domicilio de la pareja debió acudir el SAME ya que ambos sufrieron inconveniente con la presión debido al angustiante momento vivido.
Más tarde, una vez que se fue conociendo lo ocurrido, se supo que hubieron otras familias a las que llamaron con el mismo argumento, pero sin concretar el objetivo.
Desde hace un tiempo importante a esta parte, este tipo de hechos no resultan aislado, por el contrario, desde iniciada la pandemia y con diferentes argumentos han logrado victimizar a mucha gente de nuestra ciudad y la zona, a pesar de las insistentes advertencias que desde diferentes ámbitos se realizan a toda la comunidad.