Falleció Carlos Cambiasso, conocido «personaje urbano» de Gral. Villegas
Su hija María Eva lo confirmó esta tarde al ser consultada por Distrito Interior.
«El ciruja», como se lo conocía, era parte del paisaje al que lo «decoraba» con su particular figura, subido a su bicicleta o caminando tirándola de lado, generalmente juntando cartones que luego vendía.
Fue trabajador rural, pero hacía muchos años que su rutina estaba ligada a recorrer las calles. Vivía en la calle Montesantiago, frente al barrio Plan federal.
Ayer lunes por la mañana Cambiasso se fue para siempre luego de una estadía en el hospital municipal que había iniciado involuntariamente luego que protagonizara un accidente de tránsito.
La tarde del 12 de junio fue embestido por una moto 110 cc. en la calle Larrea entre Pringles y San Martín, frente al ex velódromo, en circunstancias que no están claras.
De acuerdo a los testimonios recogidos por Distrito Interior, el hombre calle de la bicicleta, fue auxiliado por el SAME que lo trasladó con fractura de fémur, el conductor de la moto, de apellido Ortíz, se habría retirado del lugar luego que Cambiasso fuera retirado. La Policía no habría intervenido a pesar de haber existido un herido.
Estos hechos luego de la muerte, cuya causa no se sabe si ha sido atribuida al hecho fortuito, cobran mayor sentido. El caso está en manos de una abogada que representa a la familia del fallecido.
Desde su internación Carlos Cambiasso experimentó un notable deterioro en su salud física y emocional; se trataba mediante diálisis, la que continúo durante los días en el hospital y el encierro le había hecho perder lucidez.
Finalmente, el domingo la propia hija lo que lo vio por última vez con vida, estaba muy desmejorado. Al otro día recibiría la peor noticia, luego llegaría el velatorio a cajón cerrado en las salas de la calle Arenales y su traslado en una ambulancia de la empresa Servicoop al cementerio.
Su fallecimiento lo visibilizó aún más. Quizá por saber que ya no estará entre nosotros, recordemos por un momento las veces que lo hemos cruzado en algún lugar de la ciudad, por otro lado deja una duda respecto al proceder de quienes corresppnde ante una eventualidad que en un principio pudo parecer un accidente/incidente más. Claramente, más allá del desenlace y las consecuencias que este pudiera tener para las partes, nunca habiendo personas involucradas, se debe minimizar.
A medida que se fue conociendo la noticia, los que lo conocieron despidieron a su manera, a un hombre común (pero distinto).
Buena persona , siempre saludaba a todo el mundo….buena gente